Nueve países de Europa suspendieron esta semana la aplicación de la vacuna AstraZeneca por temor a la formación de coágulos en la sangre. Los países que detuvieron su aplicación son: Dinamarca, Islandia, Noruega, Estonia, Lituania, Letonia y Luxemburgo e Italia.
Noruega, Dinamarca e Islandia suspendieron el jueves su aplicación, mientras que Austria dejará de suministrar un lote del biológico, a pesar de las tranquilizadoras declaraciones de la EMA y del fabricante.
Otros cuatro países europeos, Estonia, Lituania, Letonia y Luxemburgo, suspendieron la aplicación. Esos países tomaron la decisión tras conocer “sobre casos graves de coágulos sanguíneos en personas que han sido vacunadas con la vacuna COVID-19 de AstraZeneca”, según un comunicado danés.
“La posición del comité de seguridad de la EMA (…) es que los beneficios continúan superando los riesgos y la vacuna puede continuar administrándose mientras está en curso la investigación de casos de eventos tromboembólicos”, dijo la EMA.
Con información de AFP.